¿Estás en un trabajo miserable?
Si usted le pregunta a una persona que defina que entiende por un buen trabajo, obtendrá una variedad de respuestas. Para algunos, es un buen trabajo el que pague bien, para otros depende del prestigio de trabajar para una empresa conocida y para otros puede ser la libertad para evitar estar todo el día detrás de un escritorio en una oficina.
La definición es totalmente subjetiva.
Lo que no es subjetivo es la definición de un trabajo miserable. Personas que son miserables en sus puestos de trabajo temen ir a trabajar y llegan a la sus casas frustrados, derrotados y cansados.
El costo de un trabajo miserable es muy alto, tanto para los individuos como para sus familias y amigos. Con el tiempo, este dolor puede erosionar la confianza en sí mismo y la pasión.
Algunos estudios muestran que el 77 % de los trabajadores no están satisfechos con su trabajo, y que la causa principal de su insatisfacción no es el pago o beneficios, sino más bien la relación que tienen con su supervisor.
Tal insatisfacción generalizada mata la moral y la productividad en las empresas y sube el costo de reclutamiento, contratación y capacitación de nuevos empleados. Gallup estima que el costo anual para la economía estadounidense de este fenómeno es de 350 billones de dólares.
¿Sabes cuáles son los signos de un trabajo miserable? Este martes, en nuestro Conversatorio de Poder, estuvimos discutiendo sobre este tema con Roberto Blanco. ¿Quieres participar en una de nuestras charlas o llevarla a tu empresa? ¡Contáctanos!
Aquí les dejamos un extracto del conversatorio de este martes 24 de abril.
Aquí les dejamos un extracto del conversatorio de este martes 24 de abril.